domingo, 25 de junio de 2017

"EL ABORTO"

Por: Pedro Miguel Fernández - 2017

Abordar el tema del aborto encierra un sinnúmero de dificultades debido a la multiplicidad de factores que éste incluye y a las consecuencias que del mismo se derivan. Entre dichos factores cabe mencionar lo femenino, lo económico, lo religioso, lo político, lo científico, entre otros. De alguna manera, cada uno de estos factores constituye un problema que dificulta el camino hacia un consenso plausible.

Lo femenino. Dado que el estado actual de la realidad es consecuencia de cómo han ocurrido las cosas hasta el momento en que estamos, no sabemos (sólo podemos inferir) cómo serían las cosas si los acontecimientos hubieran ocurrido de otra forma. ¿Qué pensaríamos del aborto si fueran los hombres los que se embarazaran? ¿Cómo se juzgaría el aborto si el mundo no girara en torno patriarcado?

Aunque puede que hayas quienes entiendan lo contrario, el hecho de que sea una mujer la que se embarace en un mundo patriarcal tiene un significado particular. Si a esto agregamos el hecho de que hasta hace menos de 500 años la mujer era entendida y tratada como objeto sexual, reproductivo y comercial; y en tanto objeto, sin derecho de decidir sobre sí misma; y que aunque el cristianismo le reconoció estatus de humana, no fue sino hasta hace unos pocos años que ha podido empezar a disfrutar de ciertos derechos y libertades gracias a las luchas de los movimientos feministas; entonces podemos entender el hecho de que los sectores conservadores le confieren más humanidad a un cigoto que a una mujer y que en caso de riego, prefieran salvar al cigoto antes que la vida de la mujer.

Lo religioso. El factor religioso es muy importante para entender el problema del aborto. Por lo menos en República Dominicana que es una nación confesional y en donde alrededor del 87% de las personas profesan alguna religión (mayoritariamente la cristiana), los argumentos religiosos cristianos tienen importancia tanto para las personas creyentes (por las creencias doctrinales que tienen), como para los políticos que tratan de complacer a los sectores que les pueden garantizar su permanencia en el poder. El problema con los argumentos religiosos es que se basan interpretaciones de la biblia que responden a los intereses de quienes interpretan, los cuales tratan de imponer por la fuerza sus argumentos al resto de los mortales. Obviamente una nación debe gobernarse sobre un estado de derechos consensuados a través de la razón, no por la moral de una religión particular.

Lo científico. Quienes han estudiado la evolución de los paradigmas epistemológicos saben que dichos paradigmas evolucionan sobre la base de consensos que, en el mayor de los casos, son impuestos desde los grandes imperios al resto del mundo. Y durante la vigencia de un paradigma, éste determina cómo se hace ciencia. Pero una cosa es la investigación científica y otra es la interpretación de los resultados de dichas investigaciones, las cuales, muchas veces, están mediatizadas por los intereses de quienes interpretan. Así muchos defienden científicamente, y supuestamente con evidencias, que se es humano desde la concepción. Lo cual parece estar poco claro hasta el momento. Los que defienden la vida desde la concepción, tienen mucha razón; porque incluso una bacteria es una vida, la cual también es una célula. Pero de ahí a que el cigoto ya sea un humano, hay una gran diferencia.

Lo político. Este factor juega un papel muy importante, porque son los políticos los que dirigen el rumbo en que irán las leyes que regirán a la nación. Pero contrario a representar los intereses de todos y todas, los políticos en el mayor de los casos sólo buscan su permanencia en el poder. Y como es obvio, habrá problemas que crear leyes que sean justas cuando se quiere congraciarse con quienes se entiende que pueden ayudar a permanencia en el poder. De manera que, a la mayoría de los políticos no les interesa ser críticos frente a la ciencia, ni frente a los argumentos religiosos, ni satisfacer los intereses de sectores minoritarios que no les representen votos. Esto, también es un problema.

Lo económico. Aquí hay que dejar claro que, en el mayor de los casos, a quienes afectan leyes en torno al aborto son a las mujeres de escasos recursos monetarios. Pues quienes tiene dinero pueden resolver viajando a un país donde haya otras legislaciones sobre el aborto. Por otro lado, la práctica ilegal del aborto favorece económicamente a quienes lo practican en la clandestinidad. Pero es un gran peligro para las mujeres que, por la razón que sea, se someten a la práctica en las condiciones más inhumanas posibles. En un país que se realizan más de 90,000 abortos al año, deberíamos tomárnoslo enserio.

En fin, tenemos diversas interpretaciones religiosas y diversas interpretaciones de las investigaciones científicas que se utilizan como argumentos para, dependiendo de los intereses, defender o no la práctica del aborto en sus diversas vertientes o en algunas de ellas. Y tanto la ciencia como la biblia dan para muchos tipos de interpretaciones.

Entre los intérpretes están los conservadores y los progresistas, entre otros. Y como sabemos, las interpretaciones de los sectores conservadores nunca han buscado favorecer las causas de las minorías, sino sus dogmas que les confieren poder. Y como en el mayor de los casos, los problemas económicos a ellos no les afectan, no parece importarles quienes son afectados por los mismos.

Así las cosas, se hace necesario que repensemos cuál es el mejor camino a seguir. Para ello, es necesaria una interpretación crítica de los textos bíblicos y de las investigaciones científicas. Por lo demás, sólo podemos preguntarnos ¿es más importante la vida del cigoto que la de la mujer?  No sabemos lo que opinaría el feto, pero ¿es lo más factible obligar a nacer a alguien que si vive no podrá ser autónomo ni independiente y tendrá que pasar la vida sufriendo? Sabemos que no es culpa de la criatura, pero ¿es obligatorio que la mujer víctima de violación o incesto tenga que llevar en su vientre una criatura si no lo desea, dado que el peso psico-emocional es inllevable? También, habría que preguntarse por las demás razones por las que las mujeres abortan: por que las obligan los hombres, por presión social o condena religiosa a la relación sexual fuera del matrimonio, por razones económicas, etc.

Obviamente, estas preguntas ya tienen respuestas pre-elaboradas por los diversos sectores, lo cual nos hace caer en un círculo aparentemente interminable, entre tanto miles de mujeres siguen practicando abortos de maneras clandestina y siendo víctimas de un sistema que no parece importarles poco la vida de las mujeres.


En medio de esta situación, es necesario prevención, acción legal y educación. Pero todo esto debería ir dirigido pensando en favorecer primero a las humanas que tenemos en medio nuestro. 

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